Millones en beneficios de comida por la pandemia podrían caducar el mes que viene

Ten students are scattered across a cafeteria, with five eating lunch at a table as an adult stands nearby.
En octubre, al menos 90,000 beneficios de comida seguían sin utilizarse en la ciudad de Nueva York, un total de por lo menos $35 millones en fondos sin usar. (José A. Alvarado Jr. for Chalkbeat)

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Millones de dólares en beneficios de comida por la pandemia en Nueva York que no se han usado podrían empezar a caducar el mes que viene, ya que la fecha límite para que las familias los usen se está acercando.

Los fondos — conocidos como Pandemic Electronic Benefits Transfer, o P-EBT— se enviaron a todas las familias de las escuelas públicas de Nueva York en varias rondas durante los últimos cuatro años. El propósito de los fondos es ayudar a cubrir los costos de las comidas que de otro modo serían recibidas en la escuela.

El año pasado, el estado distribuyó múltiples rondas de fondos, incluyendo $120 por niño para el verano de 2023, y por lo menos $391 por niño para el verano de 2022 y el año escolar 2021-22. (Los fondos de este último pago podrían ser de hasta $1,671 por niño según las ausencias relacionadas con el COVID o los días de aprendizaje remoto durante el año.)

Ahora, el último pago está por caducar para las familias que no los han usado todavía. En octubre, al menos 90,000 beneficios en la ciudad no habían sido canjeados por las familias, lo que significa que al menos $35 millones estaban en riesgo de caducar.

David Rubel, consultor de educación que ha seguido de cerca los beneficios de comida, teme que miles de familias perderán dentro de poco tiempo los beneficios que quizás no sepan que tienen.

“Imagínate que mañana por la mañana leamos que los principales programas de distribución de alimentos perdieron la mitad de su presupuesto”, dijo. “En realidad, esa es la magnitud de lo que estamos hablando”.

Las preocupaciones de Rubel surgen en parte por los datos que pidió y obtuvo bajo la Ley de Libertad de Información del estado, y que los funcionarios estatales confirmaron. Los datos mostraron que para los beneficios P-EBT emitidos para el verano de 2021, casi 600,000 estudiantes en todo el estado nunca canjearon el dinero.

Eso significa que más o menos un 27% de los más de 2.2 millones de estudiantes que recibieron los beneficios nunca los usaron — un total de beneficios sin usar de aproximadamente $222 millones.

A Rubel le preocupa que el estado no haya tenido suficientes actividades para informar a las familias sobre cada ronda de los fondos. Dijo que les ha pedido a los funcionarios estatales que soliciten al gobierno federal una enmienda a los plazos del programa.

La Office of Temporary and Disability Assistance del estado, o OTDA, que supervisa el programa P-EBT, dijo que el vencimiento de los fondos se basó en estatutos y regulaciones federales.

“La fecha de caducidad no se puede extender”, dijeron los funcionarios en una declaración.

En otros estados, los funcionarios han enmendado sus programas P-EBT para efectivamente extender la fecha límite para que las familias usen sus beneficios. En California, por ejemplo, los funcionarios permitieron que los hogares pidieran el restablecimiento de sus beneficios si se habían caducado sin que las familias los usaran.

Los funcionarios de Nueva York, sin embargo, dijeron que no tenían planes de pedir una aprobación federal para enmendar el programa P-EBT.

Esto es lo que las familias deben saber:

¿Cuándo empezarán a caducar los beneficios?

Los beneficios de P-EBT caducan automáticamente 274 días después de la última vez que se usaron, es decir, unos nueve meses después. Más del 60% de los beneficios del verano de 2022 se distribuyeron a las familias en mayo pasado, lo que significa que los fondos de quienes no los hayan usado todavía s empezarán a caducar en febrero.

Cuando las familias utilicen los beneficios, el plazo para caducar empieza a contar desde 0 nuevamente y tendrán otros 274 días antes de que los fondos corran riesgo de vencerse.

¿Cómo las familias pueden reemplazar sus tarjetas?

Las familias que hayan perdido su tarjeta P-EBT pueden obtener una de reemplazo llamando al 1-888-328-6399.

¿Por qué algunas familias no están usando los fondos?

Desde que comenzó la pandemia, la OTDA ha emitido más de $6,300 millones en beneficios P-EBT, de los cuales cerca del 60% han ido directamente a las cuentas existentes de hogares que ya estaban recibiendo beneficios del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP). Otras familias recibieron los fondos en tarjetas P-EBT emitidas por el estado.

El estado mantiene información detallada sobre los beneficios en su sitio web y opera una línea de ayuda: 1-833-452-0096.

Los funcionarios de la OTDA le dijeron anteriormente a Chalkbeat que han llevado a cabo una extensa campaña de información para el público y han trabajado con grupos de defensa para ayudar a crear conciencia sobre los beneficios de comida. El Departamento de Educación del estado también envió mensajes sobre los beneficios a todos los distritos escolares locales, añadieron los funcionarios.

Las familias con números de teléfono válidos registrados en su distrito escolar también deberían haber recibido un mensaje de texto cada vez que había beneficios nuevos disponibles, según los funcionarios estatales.

Algunas familias, sin embargo, dijeron que nunca recibieron mensajes de texto, y otras han tenido dificultades para tener acceso a los beneficios.

“Debemos lograr un 100%”, dijo Angela Trude, profesora de la NYU que ha estudiado el acceso a comida y beneficios del gobierno. “Queremos que todo el mundo aproveche los beneficios”.

Trude dijo que ella ha trabajado con familias que suponen falsamente que usar los beneficios podría restarles dinero a otras familias más necesitadas, o que el gobierno en algún momento les pedirá que devuelvan los fondos.

Es crítico combatir estos conceptos erróneos, dijo ella, y a la vez comunicar que todas las familias deben utilizar los beneficios.

“Si estas familias sienten que les están quitando a otras, entonces en vez de no utilizarlos, pueden comprar alimentos no perecederos y donarlos a organizaciones comunitarias y despensas de alimentos”, añadió Trude.

Rubel cree que casi todas los beneficios caducados del desembolso del verano de 2021 ocurrieron entre familias que no son beneficiarias del SNAP, ya que los hogares del SNAP recibieron los beneficios en sus cuentas existentes y pudieron seguir gastando como de costumbre para utilizarlos.

Para las familias que han podido aprovechar los beneficios, los defensores han dicho que pueden tener enormes consecuencias. Rachel Sabella, directora de No Kid Hungry New York, dijo que los fondos del P-EBT “pueden ser la diferencia un niño que pasa hambre o uno que tiene una comida sana y nutritiva”.

“Sabemos que las familias están sufriendo — 3 de cada 4 nos han dicho que ahora ha sido más difícil poder comprar alimentos que en 2022 — así que esperamos que todos los hogares con derecho al P-EBT aprovechen este beneficio”, dijo en una declaración. “Sabemos cuán importante es dar a conocer estos fondos antes de que caduquen, y les pedimos a las familias a que revisen sus cuentas de EBT y tengan sus tarjetas a la mano”.

Nueva York necesita más programas de información, dice un experto

Wendy De La Rosa, profesora adjunta de marketing en la Wharton School de la Universidad de Pensilvania que ha estudiado los beneficios públicos, dijo que Nueva York y otros estados deberían hacer más para comunicarse de forma eficaz con las familias.

Usar mensajes de texto para avisarles a las familias sobre sus beneficios es un método “fundamentalmente defectuoso”, según De La Rosa.

“Las estafas están por las nubes, y todos los expertos en seguridad nos dicen que tengamos miedo”, dijo. “¿En qué mundo pensaríamos que un solo mensaje de texto — que con frecuencia proviene de un número desconocido — va a lograr que más gente lo reciba y capte?”

Agregó también que, en el caso de estudiantes con vivienda inestable, los números de teléfono que están en los archivos de los distritos escolares pueden tener errores o no estar actualizados.

“Tiene que ser un mensaje de texto, y un email, y una carta, y llamadas telefónicas, aparte de realmente determinar ¿A qué padres no hemos llegado?”, dijo De La Rosa. “Y luego hay que hacer un esfuerzo concertado para llegar a ellas y que todos estén informados”.

Algunas familias también responden mejor a cierto tipo de comunicación cuando se trata de beneficios. Lograr que las familias sientan más de los beneficios son suyos puede hacer que los aprovechen más, dijo De La Rosa. Es más probable que las familias usen beneficios presentados como un derecho, que los presentados como un programa de ayuda.

Programa permanente de beneficios de comida de verano a la vuelta de la esquina

A pesar de sus preocupaciones, a De La Rosa le satisface que Nueva York está entre los estados que han optado por adoptar un programa permanente federal de beneficios de comida en el verano. En todo el país, 9.5 millones de estudiantes que hubiesen sido elegibles para los beneficios probablemente se quedarán sin ellos este año, ya que por lo menos 12 estados no quisieron participar en el programa.

“Cuando se pone en ese contexto — que los niños de familias en algunos estados están pasando hambre porque los legisladores no han querido adoptar esta política — es evidente que Nueva York les lleva ventaja”, dijo ella.

Julian Shen-Berro es un reportero que cubre la ciudad de Nueva York. Comunícate con él enviándole un email a jshen-berro@chalkbeat.org.

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